¿Te encantaría cogerte un año sabático e irte a viajar pero el miedo a ir solo (o sola) retrasa tu decisión?
Mucha gente dice que le gustaría cogerse un año sabático pero que tienen miedo a viajar solos… Siempre hay un “me encantaría” y un “pero” detrás que les aleja de su sueño.
¿Eres tu una de ellas?
¡Pues vamos a ponerle remedio!
Hoy escribiré éste post en femenino, porque las dificultades para viajar solas, acostumbran a ser mucho mayores en mujeres que en hombres. Obviamente, todo lo que aquí compartiré, sirve para vosotros también chicos 🙂
¿Nos ponemos a aniquilar todas tus excusas para que viajar sola deje de ser un impedimento?
¡Pues vamos allá!
La soledad no existe
Primero de todo…
Métete esto en la cabeza: la soledad no existe.
O bueno, si existe, hasta que aprendes a estar sola y entonces dejas de sentirte sola. Y el sentimiento de soledad, como tal, deja de existir.
Cuando aceptas la soledad, más que un sentimiento de “contracción”, “cierre” o “ bloqueo”, se produce un sentimiento de “apertura” y “expansión”.
Empiezas a absorber la vida, y aceptarla tal cual es. Y la vida, vivida así, es bella, aunque caigan lágrimas por la mejilla…
La soledad, no es estar sola.
Sentirse sola, no es estar sola.
Todo es una cuestión de percepciones y de cuán conectada estás al mundo, a tu existencia, al universo entero y a ti misma.
La soledad es un estado alterado de percepción de la realidad en la cual un individuo se siente separado del mundo que le rodea, con el cual no puede interconectarse.
La soledad la siente aquella que busca fuera lo que no encuentra dentro de sí misma.
La soledad la siente la que busca constantemente compañía, entretenimiento, amor o diversión porque no sabe estar sola consigo mismo. Es decir, la que rechaza el momento presente tal cual es.
La que acepta el momento presente tal cual es no niega ni rechaza la soledad, la acepta como compañera de camino.
No la califica como algo “negativo”, sino como algo placentero, reconfortante, agradable, o un lugar donde puede crecer y nutrirse personalmente.
No se porqué, pero de toda la vida he pensado que la soledad no existe. Siempre hemos sido grandes amigas.

Momento de soledad entre campos de té, en Sri Lanka
Vayas donde vayas, habrá algo o alguien.
Personas. Coches. Plantas. Árboles. Montañas. Ruido. Aire. Fuego. Agua. Tierra. Lluvia. El sol. La Tierra. Pájaros volando. Hormigas por el suelo.
Si cierras los ojos y te paras a sentir, te darás cuenta que hay mucha energía a tu alrededor y cuanto más profundo vayas dentro de ti, más “abrazada” y “no-sola” te sentirás por todo lo que te rodea… ¡aunque no haya ni una sola persona!
¿Cuántas veces has estado rodeada de gente, familia, amigos, pareja… y aun así te sentías sola?
Eso demuestra que la soledad no es nada que tenga que ver con el número de personas que tengas a tu alrededor, sino con un estado de conexión contigo misma.
La tradición no-dual habla precisamente de esto, de la importancia de aprender a percibirnos como UNO con el universo, desde un estado de no-separación.
Y eso es lo que también se alcanza gracias a la meditación, el yoga, el txi-kung, el tai-chi y cualquier otra práctica, técnica o herramienta que pretenda ampliar tu nivel de consciencia, más allá de la percepción del mundo físico y terrenal.
A mí siempre me encantó la soledad. Pese a que soy un ser muy sociable, mis momentos de soledad son necesarios e innegociables.
Mi esencia espiritual hace que mi alma reclame esa conexión profunda con el mundo, el cual percibo más allá de la apariencia física. Un mundo energético, sutil, extrasensorial, más allá de lo simple y meramente “humano”, casi divino.
Hace unos años escribí ésta poesía.
Recuerdo perfectamente que la escribí en plena naturaleza, en una roca contemplando un valle. Resume totalmente la esencia de lo que aquí te quiero transmitir.
SOLEDAD EN PLENITUD
¿Qué es estar sola?
La soledad no es nada,
es una ilusión de la mente,
un sentimiento con dos caras,
es fundirme en mi yo contigo.
Tu. Ser Superior.
No existe soledad
cuando el Amor inunda tu vida.
Y… tu inundas la mía.
Vives en mi.
Fundida en ti yo vivo,
como en un abrazo eterno,
vivindo el idílio que siempre soñé,
el de una vida plena y gozosa,
llena de Amor.
¿Qué es estar sola?
No existe la soledad.
Invención del hombre
que desarraigado de la tierra
busca en el otro
la plenitud de su ser.
La soledad es un artilugio humano
creado para no mirar adentro,
proyectando hacia fuera,
huyendo de nuestra verdad.
No existe.
Siempre habrá un pájaro a tu alrededor,
una abeja fabricando su miel,
una hormiga acarreando su comida,
el viento susurrándote en silencio.
¿Le oyes?
Siempre ha estado, y siempre estará,
ofreciéndote su mejor compañía,
abriéndote las puertas de tu corazón,
para que vivas en él,
sin huir de él.
Si te hablo, es que estás. Tu, Ser Divino.
Si te siento, es que estás. Tu, Verdad Eterna.
No hay soledad. Sentimiento subjetivo.
Verdad parcelada.
Tu, Madre Tierra, Naturaleza,
tu eres mi mejor compañía.
Tu, Sol, luz que irradias fuerza,
el que me recuerda que no estoy sola.
Tu, río, hoja, camino, fuente, lluvia.
Vosotros me acompañáis e ilumináis mi camino.
Gracias por Ser.
Gracias por elevarme.
Gracias por existir.
Cintia
Si eres de las que evitas la soledad, te invito a que abras tu nivel de percepción y empieces a verla como una buena amiga, de la cuál puedes aprender muchas cosas si eres capaz de sostenerla, caminar a su lado e interpretar sus silencios.
En mi humilde opinión, sentirte un ser separado del mundo no te trae otra cosa más que sufrimiento.
Borra todo tipo de software de “soledad” que intoxique nocivamente tu libertad.
No alimentes la creencia de que “estar sola es malo” ni “viajar sola es peligroso”.
No des lugar a la mente para que te manipule y te lleve a la asociación de la soledad como experiencia negativa. No dejes que todo el condicionamiento social y cultural se adueñe de tu vida.
Piensa en positivo, y vive en positivo.
¡Ábrete a toda su belleza!
Cómo aceptar la soledad
A continuación te cuento 3 puntos básicos que tienes que tener muy en cuenta para aprender a convivir con la soledad y disfrutar de ella.
#1 No evitándola, no rechazándola
No huyas de ella. No pretendas escapar. Como un fantasma, te perseguirá hasta que seas capaz de mirarla a los ojos y reconocerla como amiga y compañera de camino.
Hazle un hueco en tu corazón y déjale que te acompañe…
#2 Abrirte al momento presente
Esto es abrirte a la experiencia tal como es, sin pretender cambiarla o que sea diferente de como es.
Aceptando, sin luchar contra ella.
No pretendiendo que las cosas sean siempre buenas, bonitas y placenteras, y aceptando que la vida a veces es difícil, tiene momentos desagradables o situaciones que nos hacen sufrir.
Déjate de expectativas y proyecciones mentales. Las cosas son perfectas tal como son. El momento presente, tal como se presenta aquí y ahora, es perfecto tal cual es. (¡aunque te cueste entenderlo!)
#3 Yendo hacia tu interior
Muchas veces cuando algo no nos gusta, o nos duele, lo que hacemos es negarlo, ocultarlo, camuflarlo… ¿cómo?
Pues buscando distracciones que nos mantengas ocupadas “fuera”. Vamos de compras, llamamos a una amiga o nos ponemos una peli…
ERROR.
Hay que ir hacia dentro, soportar esos momentos de soledad conectando con tu ser, llenarte de ti de nuevo y dejar que la ola pase… Eso es solo un momento.
Una vez la ola haya pasado, comprenderás de donde viene esa soledad, ese miedo… y podrás sentir tu propio abrazo interior transformado en un gran sentimiento de amor. Y ello te llevará de nuevo a tu estado natural de unidad (no-separación del mundo exterior) y paz interior.
Te dejo un pequeño video de Sergi Torres que explica muy bien éste concepto:
Mil motivos por los cuáles deberías viajar sola
Yo, como mujer que he viajado sola en varias ocasiones, puedo defender y atestiguar todo lo que me ha aportado el hecho de coger una mochila y aventurarme a irme sola, allí donde el corazón me llevara.
El grado “de soledad” fue in crescendo, conforme fui cogiendo más confianza en mí misma y fui dándome cuenta que la sociedad pretendía venderme un producto con el cuál yo no estaba de acuerdo.
Entiendo perfectamente que si no lo has hecho nunca antes, el ruido a tu alrededor y las opiniones (catastrofistas, terroríficas y súper negativas del entorno) te estarán echando atrás.
Pero la clave no está en renunciar a tus sueños, sino en superar tus miedos para empoderar tu vida y ser dueña de tu destino.
Yo, al principio, acostumbraba a viajar sola colaborando con ONG’s o proyectos solidarios (como cuando fui a Etiopía o mi primer viaje a India del norte), y luego ya sí me aventuré a viajar sola de verdad (como en mis viajes a Sri Lanka, India del sur por segunda vez, Myanmar, Vietnam u otros países del sureste asiático).
Consejo: Si nunca has viajado sola y quieres dar el paso, proponte un reto pequeño, y poco a poco ves marcándote retos mayores.
Por ejemplo: Si tu sueño es irte a viajar por Asia pero te da miedo empezar por ahí, vete sola primero al país vecino, o a otro país de tu mismo continente… y verás como poco a poco te aventurarás a ir a lugares más lejanos o a pasar sola más días fuera.
Los recuerdos que llevo en mi mochila son tantos que condensarlos es muy difícil pero si tuviera que resumir la experiencia de viajar sola en 6 palabras, lo definiría así:
- INCREÍBLE
- REVELADORA
- TRANSFORMADORA
- EMPODERADORA
- LIBERADORA
- EXTÁTICA (llena de éxtasis, o alegría de vivir)
De todo lo que te he contado hasta ahora, supongo que ya te habrás hecho una ligera idea de que hay mucha manipulación mental, muchas creencias limitantes y una influencia cultural importante que nos impide viajar solas.
Con ello quiero animarte a que abras los ojos a una nueva manera de ver el mundo, donde recuperes todo tu poder, para vivir la vida que sueñas sin estar limitada a creencias que no te ayudan (¡para nada!) a ser libre.
Otro consejo: Por favor, ¡apaga la TV! Lee más blogs de viajeros y viajeras, más libros de viaje y experiencias enriquecedoras que puedan transmitirte de verdad lo que se vive cuando se viaja sola. ¿Acaso crees que la TV puede darte una información severa y objetiva?
Pero si todavía te faltan motivos para lanzarte a viajar sola, aquí te doy unos cuántos más…
¿Por qué deberías viajar sola tú también?
#1 Sentimiento de competencia personal: “Se valerme por mi misma”
Muchas personas sienten que necesitan a otras personas para poder valerse por la vida, y ese sentimiento se multiplica mucho más en el caso de las mujeres, que parece que a menudo necesitamos a otras personas o un hombre que nos dé seguridad.
Viajar sola te demuestra que no. No necesitas a nadie a tu lado. Tú puedes valerte por ti misma. Tu puedes sacarte todas las castañas del fuego y eso te da un profundo sentimiento de valía, auto reconocimiento y autoestima.
¡Porque sí, porque tú puedes con eso y mucho más!
#2 Independencia emocional
No nacemos demasiado educados para ser independientes emocionalmente, más bien todo lo contrario, el sistema pretende aborregarnos, que sigamos el camino que ha sido marcado para todos y que no nos salgamos de él.
Además, hay muchos vínculos emocionales con personas, entornos y actividades: a la familia, a los amigos, a nuestras posesiones materiales, a nuestro trabajo… y todo eso acostumbran a ser “ataduras” que nos impiden volar.
Para volar hay que soltar, renunciar y dejar ir muchos apegos.
Al principio no es nada fácil, pero conforme lo vas logrando, eso te aporta un sentimiento muy grande de independencia emocional, y te das cuenta que podrás querer mucho a tus padres, tus amigos, tu vida… pero no por ello, debes renunciar a todo lo demás.
A ellos los tendrás siempre, ¡pero hay trenes que se marchan y no vuelven nunca más!
#3 Ganas libertad en todos los ámbitos de tu vida
Irte a viajar sola es una experiencia de no-retorno a tu vida anterior.
Una vez ganas libertad, ya no puedes volver a una vida donde los demás intentan controlarte y te dicen lo que tienes que hacer. Ya no puedes volver a trabajos mediocres, a parejas que intentan controlarte, a amistades que no te valoran tal como eres.
Tu vida se transforma de raíz, cultivas nuevos valores que asientan las bases de un nuevo y apasionante futuro, y la libertad es el más grande de ellos. El máximo ideal que la mayoría de personas persiguen.
¿Qué defendían Gandhi, Mandela o el Che Guevara? La libertad, el derecho a decidir, la capacidad de autogobernarse.
Yo siento que soy verdaderamente libre desde que empecé a viajar sola. Algo muy fuerte se ha instalado en mí y mi ilusión ahora es trabajar duro día a día para poder mantenerla.
Para mí viajar sola es la puerta a la libertad, el pasaje directo por autopista… ¡y sin peajes! 🙂
#4 Te da la fortaleza para asumir cada vez retos mayores
Para mí, la experiencia de irme a viajar sola lo definiría como “la experiencia que me ha convertido en imparable”.
Si he hecho eso, sé que puedo hacer mucho más. El hecho de haberlo intentado, y haberlo logrado, me da mucha fuerza para asumir otros retos mayores.
La vida te reta constantemente, y más que sentirme “pequeñita”, me siento “grande” para asumir lo que sea que tenga llegar.
¡Es como entrenar el músculo del coraje y la valentía!
#5 Te abres mucho más a la experiencia
Cuando viajas sola, los sentidos los tienes mucho más abiertos y receptivos a tu entorno. Estás más atenta, miras todo con mucho más detalles, te detienes más.
Sola es más fácil estar presente, básicamente porque al no estar hablando o interaccionando todo el día con alguien, puedes centrarte más en el entorno, en las personas, en la cultura o los pequeños detalles del lugar que visitas.

Jugando a hacer pompas de jabón con una niña en Myanmar
Cuando vas con alguien, estás “comentando la jugada” todo el rato, a veces tienes charlas sobre temas que ni te van ni te vienen, o a tu compañero le apetece salir a tomar algo y a ti no, o la otra persona tiene un mal día y te toca ser “su paño de lágrimas”.
Obviamente, puedes intentar ir más a la tuya aunque viajes acompañada, pero es mucho más complicado, porque se supone que las decisiones las tomáis a medias entre los dos (o más).
Esto está estadísticamente probado: viajando sola conoces mucha más gente que cuando viajas con alguien. También por una sencilla razón: cuando viajas acompañada, la gente no se acerca tanto a ti, dan por hecho que no les necesitas.
#6 Aprendes a confiar en la vida
Antes de lanzarte a la aventura de viajar sola tendrás la cabeza llena de miedos, historias que te han contado y nubes que te impiden ver la realidad tal cual es.
Una vez te lanzas a viajar y te das cuenta que ni te has muerto, ni te han violado, ni se ha hundido el barco, ni se ha estrellado el avión, ni te han acosado en el camino… te abres a la vida y confías en ella.
Sabes que ella te cuida y te protege. Sientes una fuerza superior que te guía, y tienes un profundo sentimiento de que pase lo que pase, estarás a salvo.
Es un sentimiento precioso, ¡que te animo a descubrir!
#7 Te haces responsable de tu propia vida y tus sueños
¿Sabes quién es la única persona que puede ayudarte a hacer realidad tus sueños?
Tu misma.
¿Y qué pasa si esa persona está limitada por miedos que le impiden hacer realidad sus sueños?
Pues que… ¡bye bye sueños!
Si no los haces realidad tú, nadie los hará por ti.
Nadie puede hacer tu trabajo. Nada puede colocar las fichas en el puzzle que debes colocar tu.
Así que, a menos que quieras arrepentirte el resto de tu vida, o seguir viviendo una vida mediocre, te va a tocar ponerte a trabajar…
¡Responsabilidad total sobre tu vida y tus actos!
#8 Te puedes enamorar… ¡locamente!
Cuando una viaja sola le pasan muchas cosas inesperadas, ¡muchísimas! Y la probabilidad de que te enamores, o de que disfrutes de una noche inolvidable es bastante alta porque todo se vive a flor de piel y las emociones afloran de la nada.
A mí lo mejor que me ha pasado viajando, fue que conocí a mi alma gemela. Le conocí en Yangón (Myanmar) en el momento menos esperado, justo el día después de haber salido de un centro de meditación en Sri Lanka donde estuve más de un mes.
Salí de allí flotando, super conectada, para nada iba flirtreando o buscando romances.
Pero allí estaba él, en el mismo dormitorio colectivo que yo. Bastó una conversación muy profunda y un desayuno juntos para darnos cuenta de que lo nuestro trascendía más allá de una simple atracción física.
El amor salía por nuestros ojos desde el primer momento y los dos tuvimos la certeza de que ya no nos íbamos a separar.
De momento… es casi 1 año ya juntos viajando y viviendo las 24 horas del día juntos. Sin problemas. Sin discusiones. Enamorados hasta la médula. Creciendo y construyendo un apasionante futuro juntos. Felices, ¡sin más!
¡Ojo no te vaya a pasar a ti lo mismo! 🙂
#9 Inspiras al mundo con tu libertad, y a otras mujeres
El mundo está repleto de historias de personas que viven sometidas, infelices, trabajando mil horas, “vacías” o que simplemente viven una vida normal y mediocre.
Pero lo que NO abundan tanto son los héroes y heroínas. Personas valientes dispuestas a reventar todas sus cadenas para ser libres de verdad. Personas que salen en busca de sus sueños, les cueste lo que les cueste.
Todos queremos un mundo mejor, pero nos faltan más líderes, más ejemplos alrededor nuestros que nos inspiren y nos den la fuerza y el coraje para hacer lo mismo que ellos han hecho.
¿Quieres ser tu una de ellas?
¡Adelante! El mundo necesita heroínas, mujeres valientes como tu dispuestas a inspirar el mundo con sus ideales y su vivo ejemplo.
Para mi esta es la mejor manera de contribuir a la sociedad en la cual yo creo y la sociedad de mis sueños. Proclamando libertad y siendo el vivo ejemplo de él.
¡Querer es poder!
¿Necesitas más razones que te animen a viajar sola?
Prepárate porque aquí te traigo una buena artillería de artículos que derribaran todos tus miedos y creencias limitantes.
Te recomiendo que te los leas todos durante un fin de semana y te empapes de lo que yo y otros bloggeros viajeros queremos compartir contigo.
Propuesta nº1:
Te animo a leerte la colección de posts de mi blog titulados «Operación año sabático», creo que pueden irte de maravilla:
Operación año sabático II ¿Qué puedes hacer si no tienes dinero o tienes una hipoteca?
Operación año sabático III: ¿Cómo puedo cogérmelo si tengo familia o hijos?
Operación año sabático IV: ¿Cómo supero mi miedo a la incertidumbre?
Operación año sabático V: ¿Cómo puedo ser valiente para dejar mi trabajo y ser libre?
Propuesta nº2:
Pero además, te animo a que te pases por los blogs de éstas dos peazo mujeres viajeras en solitario, veteranas en el arte de viajar y artistas que te aseguro te inspirarán:
Aniko Villalba: Viajando por ahí
Andrea Bergareche: Lápiz nómada
Te recomiendo altamente que te mires éste vídeo de Aniko Villalba donde explica porque se fue a viajar sola y qué obstáculos tuvo que superar para hacerlo
Propuesta nº3:
Más cosas. Espero que poco a poco vayamos aniquilando todas tus excusas…
Aquí te lanzo toda una batería de posts de viajeros bloggeros que también han viajado solos y te cuentan más “porqués”.
Top 10 artículos sobre viajar solo de Inteligencia Viajera
Charlas viajeras #2: Aniko Villalba. La chica que vive viajando desde 2008 de Inteligencia Viajera
Edición especial viajes en solitario (2): viajar solo de Viajando por ahí
5 motivos para viajar sola de Xixerone
Como viajar solo sin quedarse solo de Vivir al Máximo
Las 7 razones definitivas para viajar solo de Ruta Kaizen
Propuesta nº4:
Además, te invito a que te unas a la comunidad de Facebook Viajo Sola.
Una comunidad que pretende ayudar a mujeres a animarnos a viajar solas, empoderarnos y hacer piña para darnos las unas a las otras el coraje y la valentía de hacer realidad nuestros sueños.
Ros, la creadora de ésta comunidad, con la ayuda de Itzy, están haciendo entrevistas a mujeres viajeras en solitario (entre ellas, participaré yo), con la finalidad de realizar un documental y álbum de fotografías que den vida a historias anónimas tan interesantes como podría ser la tuya.
Además, colaboraré con ellas escribiendo en alguna de sus secciones.
¿Te vienes con nosotras?
El proyecto “Viajo sola” lo encontrarás en la página web http://viajosola.com/
Propuesta nº5 – ¡EXTRA BONUS!
Si sientes que tu miedo a viajar sola está relacionado con otros tipos de miedos, encontrarás más información complementaria en mi EBOOK GRATIS:
Todo lo que necesitas saber para cogerte un año sabático.
Guía + Workbook para que diseñes un plan de acción y superes todos tus miedos y obstáculos.
¡Puedes descargártelo AQUÍ!
Espero que todo esto que he compartido contigo te de la fuerza para empezar a tomar decisiones y pasar a la acción… ¡sin miedo!
¡Adelante valiente!
Sé el ejemplo que quieres ver en el mundo.
Un fuerte abrazo de todo corazón,
Cintia
Si te ha gustado el post AGRADECERÍA ENORMEMENTE que lo compartieras en tus redes sociales, así me ayudas a hacer felices a más personas… ¡y me haces feliz a mí!
Me encantaría que me contaras…
¿A ti también te gustaría viajar sola pero te da miedo?
¿Cuál es tu miedo principal?
¿Sientes que puedes llegar al punto de atreverte a viajar sola, o crees que será difícil conseguirlo?
Te espero en los comentarios… ¡va dime algo, que me sacarás una sonrisa! Así tendré el gran gusto de saber de ti 🙂
Otros posts relacionados de mi blog:
15 motivos por los cuáles no debes renunciar a tu sueño de cogerte un año sabático… ¡Actúa o muere!
70 cosas que he hecho durante mi año sabático (¡y no las cambiaría por nada del mundo!)
Como frenar los pies al mayor asesino en serie: el miedo
Cintia, felicidades por este pedazo de post. Está súper súper completo y estoy segura de que servirá de mucha ayuda para todas las mujeres que, como yo tiempo atrás, no se atreven a emprender un viaje solas debido a miedos y creencias limitantes de todo tipo.
Me parece muy interesante lo que comentas acerca de la cultura No-Dual y es que cuanto daño nos ha hecho el cuento de la media naranja, sobre todo a nosotras, a quien parece que nos falta algo cuando viajamos (o decidimos vivir solas).
Por mi parte es todo un honor estar junto con Aniko Villalba y más aún que me llames peazo mujer viajera, así sí que una se siente bien.
Por mi parte, dejo por aquí este post donde hablo de cómo afronté (o más bien me tocó afrontar un día) el miedo a viajar en solitario: http://www.lapiznomada.com/miedo-a-viajar-sola/
Felicidades por el post y un súper abrazo!
Hola Andrea!
Muchisimas gracias por tu comentario, ¡que bueno tenerte por aquí! Bueno, simplemente sentía que tenías que estar en éste post, pues viajeros hay muchos, pero mujeres, solas, en solitario y con una personalidad especial, no tantas. Y Aniko, por supuesto, también debía estar aquí. Así que encantada de haceros un hueco y daros a conocer a todas las mujeres que quieren hacer lo mismo que nosotras, y necesitan de nuestra inspiración.
Lo de la tradición no dual, es un tema super intersante que me apasiona. Parte de la base de que cada persona es un universo completo, dentro tenemos todos los recursos que necesitamos, pero como todo universo… dentro nuestro vive todo el espectro posible de posibilidades. Alegría y tristeza, miedo y amor, calma y exaltamiento, quietud y movimiento. Pretender vivir solo en un lado de la realidad (el bonito, positivo, el agradable, el placentero…) es negar el otro lado que también existe (el negativo, el desagradable, el que no nos gusta…) es absolutamente imposible.
La no dualidad pretende aceptar cualquier faceta de la realidad tal cual se presenta, sin negarla. Nos guste más o nos guste menos. Y la soledad, existe, pero solo aceptándola sin rechazarla, podemos ser amigos de ella y no vivirlo como algo negativo, sino como algo que simplemente está ahí, conviviendo con nosotros, al igual que también convive con nosotros la alegría y la felididad. Cuando se aprende a vivir de ésta manera, desa la lucha interna y surge un gran sentimiento de paz interior pues aprendes a aceptar que TODO ESTÁ BIEN TAL CUAL ES. NADA QUE CAMBIAR. NADA CONTRA LO QUE LUCHAR.
Tengo la intención de ir más hondo sobre éste tema… esto que aquí cuento es solo la punta del iceberg de una manera de ver el mundo mucho más profunda y consciente que lleva tu vida (sí o sí) a otro nivel de comprensión.
Seguiremos en contacto linda. ¡Un fuerte abrazo de todo corazón!
Cintia
Hola Cintia! La verdad que cuando llega ese momento en que abres los ojos y aceptas que «ese producto que la sociedad pretende venderte» no es para ti, la primera sensación que me viene a la mente es vértigo. Vértigo porque te quieres salir del camino que ya te habían marcado, y puede dar miedo lanzarte al vacío sin saber qué va a pasar.
Y mi primer viaje en solitario me ha ayudado precisamente a eso. A enfrentarme a esos miedos. Más que a superarlos, a mirarlos de frente, conocerlos y no dejar que me impidan disfrutar de la vida. Al final estos miedos no son tan negativos, nos recuerdan que nuestros sueños son grandes.
Ahora ese vértigo y esa incertidumbre lo veo como algo súper positivo, como auténtica libertad.
Y como bien dices, no hace falta irse a la otra punta del mundo para dar el paso. Se puede ir pasito a pasito si así una se siente más cómoda. Yo por ejemplo he empezado recorriendo Europa en tren. La cuestión es avanzar. Y en unos meses, camino a Australia sin billete de vuelta.
En mi último post hablo de mi evolución interior hasta decidir viajar sola y cómo esa decisión me ha cambiado. Un poco al hilo de lo que hablas aquí 🙂
Abrazoos y encantada de haberte encontrado por aquí 🙂
Hola Fani!
Muchas gracias por tu comentario… ¡y «encantada» de conocerte!
Así, es… durante mucho tiempo los miedos pueden bloquearnos, pero llega un momento que te plantas y decides ser tú más grande que ellos. Me ha encantado lo que has dicho de: «Al final estos miedos no son tan negativos, nos recuerdan que nuestros sueños son grandes»
La ilusión lo puede todo! La cuestión es ir avanzando poco a poco, cada uno a su ritmo.. tus sueños pintan genial, es recorrido por Europa en tren.. y ese viaje a Australia sin billete de regreso te están esperando!
Disfruta de tu vida a cada segundo viajera… Un fuerte abrazo!
Cintia
Hola Cintia!
Creo que todas, alguna vez, hemos sentido miedo, sobre todo cuando deseamos viajar sola. El miedo se hace presente antes y durante un viaje en solitario. Lo importante es identificarlo, aceptar su presencia, dejarlo ir y no identificarse con tal emoción (el miedo no te define). De esta forma, será posible actuar, a pesar del miedo.
Cuando viaje sola sentí pánico, desde el momento que me plantee hacerlo. Luego cuando estaba en la etapa de planificación continuaba apareciendo el sentimiento. Incluso el mismo día que abordé el avión. Pero ya viajando, y a medida que me empapaba de la aventura y de conocer a nuevas personas, el miedo se fue diluyendo.
Al miedo le encanta robar nuestros sueños. Por eso, hay que soñar a lo grande, para que ésto sea más grande que cualquier sentimiento.
¡Es la mejor experiencia de vida!
Lo único que me falta es encontrar a mi alma gemela en la ruta jajaja como tú 🙂
Un abrazo grande
Hola Andrea!
Muchísimas gracias por tu aportación y tus comentarios! seguro que son muy útiles para todas aquellas personas que sienten este miedo a viajar en solitario;
Experiencias como la tuya nos hacen ver que todos podemos transcender nuestros miedos y lograr lo que nos propongamos!
Un abrazo enorme!
María Lodoso
Asistente Virtual de Cintia Castelló
buenisimo Cintia. muchas gracias..Siempre pense igual sobre la soledad.